GOBIERNO CORPORATIVO

En los últimos años en México, el tema de Gobierno Corporativo se ha vuelto un tema recurrente, sobre todo en las empresas familiares, que, por su tamaño y crecimiento de los últimos años, se vuelve imposible mantener las estructuras administrativas tradicionales.

La tendencia a formalizar un Gobierno Corporativo permita a las empresas familiares funcionar y a mantener una absoluta transparencia de sus operaciones y facilitan los beneficios en un mundo globalizado y extremadamente competitivo. Las empresas familiares que buscan institucionalizarse y tener procesos operativos documentados, seguramente garantizarán un proceso de sucesión estables y asegurarán su permanencia en el tiempo en beneficio de sus accionistas y de las siguientes generaciones.

No podemos separar el concepto del Gobierno Corporativo, del Código de Mejores Prácticas Corporativas, como los factores más importantes para agregar valor, competitividad y permanencia a cualquier sociedad.

Sabemos por ejemplo que las regulaciones del Mercado de Valores en México exigen a las empresas que cotizan en bolsa, contar con Gobierno Corporativo, y cumplir con las condiciones descritas en los Manuales de Buenas Prácticas Corporativas, especialmente en aquellas sociedades mexicanas, que, por su naturaleza familiar, su cultura basada en principios y valores tradicionales, conservan aún la fortaleza de sus accionistas en los actos de administración y la toma de decisiones.

La forma moderna y las nuevas tendencias culturales nos llevan a entender que existe hoy una noción moral diferente. Sabemos del daño causado por las prácticas inmorales y la corrupción en todo sentido y son hoy las nuevas generaciones, las que exigen mayores niveles de igualdad social, equidad de género, respeto y cuidados del medio ambiente, la discriminación en cualquier sentido ya sea de raza, género, preferencias sexuales y de culto. Los negocios no pueden escapar de estas nuevas tendencias y se incorporan en sus operaciones, los principios relativos a la ética en los negocios, a la responsabilidad social empresarial, a la prevención de operaciones y hechos indebidos y prácticas que escondan posibles conflictos de interés.

Son justamente en este sentido que las mejores prácticas corporativas ayudan a las empresas familiares a iniciar e implementar la institucionalización de un Gobierno Corporativo que les permita funcionar y a mantener una absoluta transparencia de sus operaciones.

Las instituciones financieras y de crédito, también ven con buenos ojos la implementación de estas prácticas para poder acceder a fuentes de financiamiento en condiciones favorables, para satisfacer la constante necesidad de fuentes de financiamiento

Cualquier tipo de empresas, ya sean de carácter mercantil, civil o asistencial, sin distinguir si cotizan o no sus acciones en el mercado de valores, obtienen enormes beneficios al seguir las recomendaciones del Código de buenas Prácticas Corporativas. Las empresas familiares que buscan institucionalizarse y tener procesos operativos documentados, seguramente garantizarán un proceso de sucesión estables y asegurarán su permanencia en el tiempo en beneficio de sus accionistas y de las siguientes generaciones.

Sirva este comentario, para motivar la reflexión de empresarios, consejeros, accionistas, contadores, etc. para buscar los contenidos de las buenas prácticas en los negocios y sobre todo en las pequeñas y medianas empresas, a fin de mantener y asegurar el crecimiento de la mayor fuerza empleadora de nuestro país y a la continuidad y fortalecimiento de nuestra emergente economía abierta y exitosa.

En nuestra consultoría de gobierno familiar, Mente Reflexiva, S.C. aporta años de experiencia y capacitación para crear con usted un Modelo de Gobierno Corporativo claro y práctico que refleje las realidades y necesidades de su negocio familiar. Somos sensibles a las cuestiones especiales dentro de las familias para las que la creación de un gobierno formal está modificando por primera vez los hábitos familiares y tradicionales en la forma de llevar sus operaciones cotidianas para implementar procedimientos objetivos, claros y duraderos.